Las plaquetas son células medicinales de señalización humana diferenciadas periféricas que todo ser humano contiene en su sangre (células autológas) dentro de ellas llevan los conocidos factores de crecimiento, y que son de mucha ayuda tanto en fines terapéuticos como de regeneración celular de los diferentes tejidos donde se aplican, también son utilizadas en la actualidad con fines cosméticos. Bioestimulación Cutanea
Estos factores de crecimiento que contienen proteínas inician la cicatrización del tejido conectivo: huesos, tendones, músculos y ligamentos. La terapia biológica de PRP regenera el tejido dañado en pacientes en que simplemente han fallado otros tratamientos y los aleja de la cirugía.
Constantemente buscamos terapias para renovar nuestra piel, ya sea del rostro como del cuerpo, y nos encontramos con un sinnúmero de tratamientos que prometen eliminar el problema de envejecimiento y flacidez. Entonces pensamos ¿cuál es el indicado en mi caso? ¿por cuál debo empezar?
Dentro de las nuevas tendencias repuntan con gran fuerza las denominadas terapias de bioestimulación cutanea, que se basan en la estimulación para la regeneración, reestructuración y/o neoformación de las células que comienzan a fallar en su acción, conllevando al inicio del envejecimiento.
El envejecimiento tiene causas externas (exposición solar, tabaco, alcohol, poco descanso, etc.) e internas (herencia, hormonal, etc.) por lo que no se puede hablar de una fecha o edad específica para comenzar los tratamientos pero, de acuerdo a nuestros hábitos de vida y/o nuestros genes podemos saber cuando iniciar una terapia preventiva y hasta curativa. bioestimulación cutanea
Las terapias de Bioestimulación Cutánea se pueden englobar en dos grupos: autólogas y heterólogas, pudiendo aplicarse sólo una de ellas o las dos, según sea el caso.